viernes, 4 de junio de 2010

Clarificar o reformar

El gobierno emite señales peculiares sobre la reforma laboral. Según parece, piensa clarificar las causas de despido objetivo sobre la base de la jurisprudencia del Tribunal Supremo. Dicho así, parece bastante anodino. Al fin y al cabo, se supone que esa jurisprudencia, precisamente, ya ha clarificado o está clarificando lo que hiciera falta. Por lo tanto, se busca la apariencia de que no se plantea ninguna verdadera reforma.

Sin embargo, yo creo que la cosa no tiene nada de anodino. Más bien, se trata de la parte más trascendental de la reforma que se nos viene encima. Convendrá aclarar qué está diciendo realmente el gobierno en esa modesta propuesta.

Lo primero y lo más importante es que esta medida, a diferencia de los 33 días, sí tiene efecto sobre los contratos en vigor. En otra entrada yo comentaba que la ampliación del contrato de 33 días va a tener unos efectos muy progresivos, porque sólo se aplica a los contratos nuevos. Esta parte de la reforma, en cambio, afectará a todos los trabajadores.


Como ya recoge buena parte de la prensa, no se pretende simplemente aclarar las causas de despido. Decididamente, se pretende ampliarlas. Quizá no varíe el número de causas, ni su nombre, pero sí lo hará el número de trabajadores a los que afectará.