domingo, 24 de agosto de 2014

Báñez 3 – Economía sumergida 7


El paro es una de las mayores preocupaciones de los españoles. Cabe suponer que también lo es del Gobierno. Sin embargo, la prensa no suele facilitar mucha información con la que valorar la efectividad de las iniciativas gubernamentales. Esta semana, el Ministerio de Empleo ha publicado los resultados del primer año de aplicación de su buzón contra el fraude laboral. Es una buena ocasión para saber si nuestro Gobierno está aplicando políticas acertadas.


Según la nota del Ministerio, el buzón ha permitido descubrir un total de 1,592 empleos sumergidos en un año. Para apreciar si esa cifra es grande o pequeña, hace falta ponerla en contexto. Por fortuna, la misma nota contiene tres afirmaciones contundentes:

Desde 2012 se han aflorado un total de 170.941 empleos irregulares
En 2012 y 2013 se han anulado 2.078 inscripciones de empresas ficticias
Entre 2012 y 2013 se han logrado anular 78.056 altas ficticias o contratos de trabajo falsos

Es decir, que el buzón, con sus míseras 1,592 altas, no representa ni siquiera el 1% de los empleos aflorados desde que la Sra. Báñez tomó posesión el 22/12/2011.

Los detalles estadísticos que ofrece la nota de prensa ofrecen un panorama absolutamente incoherente. Así, en Andalucía se han realizado 1299 actuaciones, pero en Murcia sólo una, igual que en Melilla. Se puede comprender lo de Melilla, que es una ciudad pequeña, pero ¿Murcia? Y lo de la ciudad pequeña debe ser relativo, porque en Ceuta se han concluido 20 inspecciones.

En Catalunya se han aflorado 94 empleos sumergidos; es decir, 1,27 por cada 100.000 habitantes; en Madrid, 211 empleos, 3,31 por cada 100.000 habitantes; en la Comunidad Valenciana, 143 empleos sumergidos, 2,88 por cada 100.000 habitantes. En Valencia, por cierto, parece que es más práctico acudir a la policía que a la Inspección de Trabajo: en julio se informaba de que:

Los efectivos de la Policía de la Generalitat valenciana han localizado  e inspeccionado 284 talleres ilegales del área automovilística, dentro de la operación Clau Anglesa, que se puso en marcha en octubre de 2012, así como 60 empresas ilegales o talleres clandestinos dentro la operación Ecosub, que se inició en septiembre de 2013

¡344 empresas ilegales! No sabemos cuántos han sido los trabajadores afectados, pero está claro que la policía resulta mucho más efectiva.

A mi juicio, la estadística más llamativa es la de las inspecciones que no han dado ningún resultado. No tenemos los detalles, pero sí datos suficientes para hacer una valoración: se han aflorado 1.592 empleos en 5.377 actuaciones. O sea, al menos en 3.785 actuaciones, el 70,39%, no se ha encontrado nada. Y eso suponiendo que en cada actuación exitosa se encontrara un solo empleo sumergido; el dato real seguramente es aún peor.

¿Qué valoración se puede hacer de la Ministra Báñez?

Esta iniciativa ya fue muy criticada en su momento, por recurrir a las denuncias anónimas. Por lo que se ve, los peores temores se han confirmado y las denuncias sin fundamento (al menos el 70%) son más del doble de las veraces (como mucho el 30%). Y todo para obtener unos resultados irrisorios: el empleo aflorado por esta vía no llega al 1% del total.

La impresión que produce es que la Ministra ha lanzado a la Inspección como un pollo sin cabeza: cargando en todas direcciones sin ton ni son para, lógicamente, no obtener ningún efecto apreciable.

Nota: Fátima Báñez 3/10 - suspendida